martes, 29 de marzo de 2016

RESPUESTA A GUIDO FERRARI

No se sabe muy bien para quién se escribe. Supongo que en primer lugar uno lo hace para sí mismo, es decir escribe lo que le gustaría leer. Pero en términos de singularidad estamos solos. No compartimos ADN ni experiencias ni siquiera con nuestro gemelo. A uno le gusta el chocolate, a otro los caramelos. Por lo cual, amigo mío, cuando aparece un lector al que le has dado un momento de alegría, el objetivo ha sido cumplido. En mi caso ya han aparecido como cuatro. Con eso me basta.  
    Guido: gracias por haber desmenuzado con agudeza y sinceridad los factores que te interesaron de “Que me vengan a buscar”. Gracias también, por haberte tomado el trabajo de escribir y dejar tu mensaje en este blog. Para quienes quieran leerlo, busquen el post “Que Me Vengan a Buscar en BAN 2012” en Entradas Antiguas.
    Como el comentario es de ayer, pero dejado en aquel viejo post, decidí abrir uno nuevo para tender un enlace entre el pasado –escrito por mí- y el presente -escrito por vos-. ¿Qué si estoy escribiendo otra novela? Acabo de abandonar una y retomar otra que había abandonado hace años. También policial. ¿Cuando verá la luz? No sé. ¿Verá la luz?
    Ah, Guido.  Lo olvidaba.  Si tenés ganas de perder cinco minutos y leer un cuento del mismo color, te invito a que busques en Entradas Antiguas un posta llamado "Marketing".
    Nada más.
    Abrazo.